De nuevo entramos a la estación lluviosa acá en Costa Rica y es común con esto la llegada a los talleres de mecánica automotriz de automóviles con algún tipo de deterioro en roles de bocina y puntas de eje en donde los propietarios de los vehículos perciben sonidos anormales en el rodaje o al momento de virar la dirección.
Deterioro de roles de bocina.
Y es que con la llegada de las lluvias el agua tiende a introducirse en las secciones donde van montados los roles de bocina con lo cual empieza un proceso de oxidación que es capaz de tan solo en algunos días crear un deterioro importante en los rodillos y sus respectivas caras de contacto provocando así ronquidos o zumbidos percibidos por el conductor como anormales.
Una vez que se presentan estos sonidos es poco lo que queda por hacer, el cambio de roles de bocina seria ya un hecho, ahora bien, hay detalles que se deben cuidar para que el cambio de roles sea exitoso.
Lo primero que se debe cambiar junto con los roles serán los retenedores, estos tienen dos funciones importantes:
- No permiten la salida de la grasa lubricante del rol hacia el exterior de la bocina.
- No permiten la entrada a la sección del rol de agentes como el agua o el polvo los cuales pueden dañarlo.
Siempre cabe destacar acá la importancia de lavar muy bien la bocina, utilizar grasa especial, verificar que el rol que se va a instalar sea de calidad y por ultimo ejercer sobre el rol una pre-carga correcta pues si el rol queda muy flojo o muy tallado serian solamente días para volverse a dañar.
Deterioro en las puntas de eje
Al igual que los roles de bocina, por el lugar donde van colocadas, las puntas de eje pueden estar en contacto directo con agua, polvo o barro, cualquiera de estos que pueda entrar en la sección interna de la punta las dañara a corto o mediano plazo, para evitar esto la punta viene protegida con un guardapolvo flexible de hule que cumple con las dos funciones anteriores del retenedor en los roles de bocina de forma que no permiten que la grasa lubricante se salga al exterior ni que los tres agentes anteriores se introduzcan en el interior de la punta.
Estos guarda polvos por lo general se podrán verificar visualmente lo que nos permite con antelación aprovechar al máximo la vida útil de la punta de eje, basta con mirar su buen estado y sujeción para poder garantizar un máximo rendimiento de este dispositivo.
La bota o guarda polvo no debe estar quebradiza o reventada y debe verse seca en su exterior sin señales de fugas de la grasa lubricante que esta en la sección interna de la punta, de no ser así se debe buscar su reemplazo de inmediato.
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