Como bien sabemos los vehículos que disponen de un motor de combustión interna en sus diferentes tipos de combustible necesitan de un motor de arranque eléctrico por el cual se inicie el giro del cigüeñal generando autonomía propia en el motor, una vez que el motor gira y mantiene por si solo las rpm el motor eléctrico deja de funcionar, la batería es la que suple corriente de alimentación al arrancador de forma que deficiencias en alguna o ambas partes imposibilitara el arranque del motor.
¿Problema del motor de arranque o batería?
Uno de los fallos mas comunes en el automóvil y que como taller automotriz en Costa Rica reparamos de forma frecuente es la imposibilidad del arranque, en muchos casos por defectos en la batería o consumos de corriente que con el vehículo en reposo terminan por descargar la batería.
La otra posibilidad es un defecto del motor de arranque o arrancador, que debido a desgastes internos de las escobillas o carbones deje de funcionar.
El síntoma cuando alguno de estos componentes se daño es el mismo, al poner la llave en posición de arranque no existe ningún sonido ni movimiento en el motor.
El motor de arranque es un alto consumidor de corriente por lo cual necesita de una batería en buenas condiciones, para descartar que sea batería deberemos medir el voltaje de la misma, una batería en buen estado debe reflejar en la pantalla del voltimetro un parámetro de entre 12.80 y 12.50 voltios.
Menos de 12 voltios generaría un movimiento lento del motor de arranque perceptible por el conductor o propietario del vehículo, menos de 10 voltios en la batería sera ya una condición en donde no existirá la acumulación de corriente necesaria para la activación del arrancador.
Síntomas de un motor de arranque malo o defectuoso
El indicador mas claro que el arrancador tiene un problema es poner la llave en posición de arranque y que no exista movimiento en el motor a pesar que la batería por medio de un Voltimetro digital refleje una carga acumulada entre los 12.50 y 12.80 voltios.
Otro caso que puede ocurrir es el de que se generen sonidos al poner la llave en posición de arranque sin que el motor de combustión gire, en este caso podrían existir daños en el famoso Bendix que se engrana en la corona del volante pero el freno de una vía falla ocasionando un sonido muy agudo, cuando se trata del bendix es posible que en algunas ocasiones el motor encienda bien y en otras suene agudo sin poder encender, este síntoma empieza ocasional y con el paso del tiempo se vuelve permanente.
El bendix en buenas condiciones permite el giro libre en un sentido de rotación pero se traba o frena en el sentido contrario.
Otro síntoma que se presenta cuando el motor de arranque esta malo es la presencia de olor fuerte a quemado, es normal dentro de su funcionamiento la elevación en su temperatura, sin embargo cuando existen daños en las escobillas o carbones o bien el rotor o el solenoide puede alcanzar niveles muy altos de temperatura que generen olores a quemado, si en el momento de utilizar el arrancador los cables positivos o negativos que salen de los postes de la batería se calientan fácilmente en un tiempo muy corto la posibilidad de un daño en el arrancador es muy factible.
Los problemas en el motor de arranque o arrancador diría que son imposible de evitarlos, su propio funcionamiento genera desgastes internos y las altas temperaturas a la que puede exponerse genera la degradación interna, también es algo difícil saber en que momento se necesita de un mantenimiento preventivo pues los fabricantes de estos componentes no proveen de fechas de mantenimiento por tiempo u horas de trabajo. La mayor parte de síntomas indican en si un daño o defecto ya presente en el componente.
En muchos casos cuando el motor no se activa por desgaste de las escobillas o carbones bastara con golpearlo con algo metálico de manera suave, los golpes generan que los carbones se corran o deslicen un poco mas tocando las pistas de la armadura y es ahí donde vuelve de nuevo a funcionar por algunos pocos arranques mas que en buena forma nos permiten llegar al taller para la reparación necesaria.
