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Parte de las revisiones visuales que podemos hacer a nuestros automóviles incluyen la revisión del nivel del fluido de la transmisión automática en vehículos que dispongan de cambios automáticos, en algunas oportunidades podremos determinar que existe un problema al ver el aceite de color rosado.

Fluido de transmisión rosado

La mayoría de transmisiones automáticas trabajan con un aceite de color rojo o color ámbar, en gran parte de ellas encontraremos una varilla para poder medir el nivel, en ocasiones al revisar este parámetro podremos encontrar como el aceite ha cambiado de color rojo a rosado.

Mezcla de refrigerante con el aceite.

Detallamos en un anterior articulo como el aceite de transmisión automática debe ser constantemente enfriado para evitar que llegue a muy altas temperaturas que lo degraden fácilmente y que atenten contra componentes internos en la transmisión. Para esto los fabricantes introducen dentro del radiador del motor un pequeño tanque para que el aceite de la transmisión fluya por ahí y pueda bajar su temperatura.

Un daño común que se presenta en las transmisiones automáticas es que el Oil cooler de la trasmisión ubicado dentro del radiador del motor presente corrosión hasta el punto en donde se genere un fisura por donde pueda mezclarse el aceite de la transmisión con refrigerante de motor o agua.

Síntomas

En la transmisión automática no existirán síntomas inmediatos a la mezcla del refrigerante con el fluido de la transmisión, si la fisura es bastante grande para que buena parte del refrigerante de motor pase a la transmisión se experimentaran sobre calentamientos del motor, por eso es muy importante estar atentos, si se presentan altas temperaturas en el motor, hace falta de refrigerante en el radiador y no se ven fugas externas podría ser una opción que este liquido se este fugando internamente a la transmisión en vehículos que dispongan de cambios automáticos.

Aunque no existan síntomas inmediatos en la transmisión al iniciarse la mezcla si existirán daños internos a corto plazo si  trabaja algunas horas en esta condición y esto podría obligar a una reparación mayor de la transmisión.

Algunos de los síntomas mas comunes cuando se ha dejado trabajar la transmisión automática con  esta mezcla de refrigerante o agua con el propio aceite es que el vehículo empieza a como a patinar, el motor acelera bien y levanta rpm de forma normal pero el vehículo se desplaza en menor porcentaje, al apagar el motor y después de unos minutos volverlo a encender el vehículo vuelve a tener la tracción normal, kilómetros después la vuelve a perder en cierto porcentaje o de manera completa.

Esto se debe a que el agua genera que el material de los discos se desprenda poco a poco y esto obstruye el filtro de aceite interno limitando el flujo de aceite, una vez que apagas el vehículo los residuos caen al Carter de la transmisión lo que permite que al volver a encender exista de nuevo flujo por el filtro algunos kilómetros hasta que se vuelve a obstruir.

Esto también podría generar sonidos extraños en la transmisión similares a cuando en el sistema de dirección hidráulica existe un nivel muy bajo de aceite

Algunas transmisiones de cambio automático no tienen la posibilidad de medir el nivel del fluido por parte del conductor de una manera sencilla por medio de una varilla, en estos casos existen otros procedimientos para la verificación del estado del fluido que en la mayoría de casos deben ser hechos por algún técnico mecánico automotriz.

Recuerden que el fluido de la transmisión automática es como una bujía en el motor, puede indicarnos directamente cual es el estado de la transmisión.